¡Indignaos!

por Corrás

Indignaos¡Indignaos! de Stéphane Hessel, es un ensayo cortito de 12 páginas, que ha llamado la atención en Francia y que en el día de Sant Jordi ha sido el más vendido.

El discurso no es nuevo, insiste en la pérdida sistemática de derechos laborales e individuales en la Europa actual, y los datos que aporta sobre Francia, son todavía más preocupantes en países como España.

La importancia del texto va más allá de los hechos económicos, sociales, políticos y sindicales concretos, no es sólo un choque generacional entre los supervivientes de la reconstrucción de Europa después de la guerra y su acomodada descendencia, es sobre todo un llamamiento a no dar las cosas por hechas.

Cuando en estas fechas asistimos a la fiesta del decreto ley nos negamos a ver la profundidad de los cambios en los que estamos inmersos y el cambio de las reglas del juego. Desde la dictadura se firmaron multitud de acuerdos en cuestiones sociales que rompían con situaciones de indefensión y que sentaban precedentes legales.

Lo peor de los recortes actuales es que suprimen esas garantías legales para siempre, no temporalmente como las nuevas políticas sociales. Subsidio de desempleo, cheque bebe, plan renove, plan E, son disparates limitados en el tiempo y con despropósito universal. Algo así como «esta ronda la pago yo, la próxima ya os apañeréis» sin contemplar la situación económica de los beneficiarios y totalmente arbitrarios en la duración.

La consecuencia es que con escaso beneficio a corto plazo pasamos por alto los peores recortes, que seguirán ahí cuando desaparezcan los subsidios, empobreciéndonos a largo plazo.

Pero los acomodados descendientes de la resistencia, damos por hecho que las medidas que nos perjudican se toman por nuestro bien, aceptamos que no hay una forma mejor de hacer las cosas, como mucho cambiar de cromos.

En la Europa de la posguerra la situación económica era peor que la actual, los políticos y sus amigos los poderosos querían lo mismo que ahora, quedárselo todo, pero tuvieron que torear con la indignación de muchos que no tenían nada que perder, como pasa hoy en tantas naciones árabes.

El aviso de Stéphane Hessel, es un recordatorio de que nunca se ha conseguido nada sin luchar, podemos esperar a que nos quiten todo y que esa lucha sea violenta, o hacerle frente a lo que está sucediendo y, sobre todo, a lo que está por venir.

¡Indignaos!.